Fotografía y viaje
Para los amantes de la fotografía, viajar es todo un lujo. Descubrimos nuevos paisajes, animales, colores, luces,… Queremos plasmar todas estas sensaciones increíbles que nos invaden cuando viajamos en nuestras fotografías, y de este modo guardar esos momentos mágicos y poder compartirlos con el mundo.
¿Qué fotografiar cuando viajas?
Cada cual tiene sus debilidades. Hay fotógrafos que disfrutan tomando fotos de las personas de cada país y cultura, con sus sonrisas, sus vestimentas, sus tareas cotidianas. Otros se vuelven locos descubriendo la belleza de la fauna autóctona de cada lugar, con sus colores y costumbres. Otros se sienten más atraídos por los paisajes que nos ofrece la naturaleza… Lo importante es fotografiar aquello que te despierta sensaciones. También es interesante seguir una línea propia para que nuestras fotografías tengan una identidad, un estilo, crear nuestra marca.
Lo importante siempre es la calidad y no la cantidad
Aunque seguramente sobre decirlo, en la fotografía (cómo en casi todo) lo importante es la calidad y no la cantidad. Por mucho que nos guste la fotografía, tenemos que olvidarnos por un momento de la cámara. Es muy importante abrir los 5 sentidos y empaparte de lo que te rodea (sonidos, olores, sabores, vista, tacto…). Camina, conoce, siente, déjate llevar hasta que te topes con aquello que te transmite una magia especial. Entonces sí: saca la cámara, analiza la luz, la composición, dispara y capta la belleza de ese momento. En ese momento sí que es recomendable hacer más de un disparo con distintos enfoques para luego poder escoger la mejor fotografía.
Hoy en día tenemos tendencia a comportarnos cómo si lo que no hemos fotografiado no hubiera existido. Por ello tendemos a tener el ojo clavado en el objetivo y disparar de manera indiscriminada. “Luego ya borraré lo que no me sirva” pensamos. Por favor, evitad este comportamiento. Vivir a través del objetivo no es vivir. El motivo principal por el que viajamos no debe ser la fotografía, debe ser la experiencia.
Acércate a tu objetivo
Aunque hoy en día existen unos zooms fantásticos, no abuses de ellos. Para realizar buenas fotografías de viaje tienes que transmitir autenticidad y espontaneidad. Para ello, lo mejor es mezclarte con el paisaje, formar parte de él, tocarlo, sentirlo. Si vas a hacer fotografías de personas es aún más importante si cabe. Si te ganas su confianza obtendrás mucha más verdad. Además, estarás ganándote su aprobación para fotografiarlos y entrometerte en su intimidad.
Revisa tus fotografías
Finalmente, pero no menos importante, aparte de disparar, cuando tengas un momento de tranquilidad revisa tus fotografías. Borra las que no te gusten y asegúrate de que has conseguido buenas fotos. Si no es el caso, estás a tiempo de volver al lugar donde has tomado la foto e intentar revivir esa sensación y repetir la fotografía. Si sólo revisas tu contenido cuando has vuelto a casa, puedes darte cuenta de errores que no podrás recuperar.
Información sacada de: http://happypeoplebarcelona.com/es/
¿Qué fotografiar cuando viajas?
Cada cual tiene sus debilidades. Hay fotógrafos que disfrutan tomando fotos de las personas de cada país y cultura, con sus sonrisas, sus vestimentas, sus tareas cotidianas. Otros se vuelven locos descubriendo la belleza de la fauna autóctona de cada lugar, con sus colores y costumbres. Otros se sienten más atraídos por los paisajes que nos ofrece la naturaleza… Lo importante es fotografiar aquello que te despierta sensaciones. También es interesante seguir una línea propia para que nuestras fotografías tengan una identidad, un estilo, crear nuestra marca.
Lo importante siempre es la calidad y no la cantidad
Aunque seguramente sobre decirlo, en la fotografía (cómo en casi todo) lo importante es la calidad y no la cantidad. Por mucho que nos guste la fotografía, tenemos que olvidarnos por un momento de la cámara. Es muy importante abrir los 5 sentidos y empaparte de lo que te rodea (sonidos, olores, sabores, vista, tacto…). Camina, conoce, siente, déjate llevar hasta que te topes con aquello que te transmite una magia especial. Entonces sí: saca la cámara, analiza la luz, la composición, dispara y capta la belleza de ese momento. En ese momento sí que es recomendable hacer más de un disparo con distintos enfoques para luego poder escoger la mejor fotografía.
Hoy en día tenemos tendencia a comportarnos cómo si lo que no hemos fotografiado no hubiera existido. Por ello tendemos a tener el ojo clavado en el objetivo y disparar de manera indiscriminada. “Luego ya borraré lo que no me sirva” pensamos. Por favor, evitad este comportamiento. Vivir a través del objetivo no es vivir. El motivo principal por el que viajamos no debe ser la fotografía, debe ser la experiencia.
Acércate a tu objetivo
Aunque hoy en día existen unos zooms fantásticos, no abuses de ellos. Para realizar buenas fotografías de viaje tienes que transmitir autenticidad y espontaneidad. Para ello, lo mejor es mezclarte con el paisaje, formar parte de él, tocarlo, sentirlo. Si vas a hacer fotografías de personas es aún más importante si cabe. Si te ganas su confianza obtendrás mucha más verdad. Además, estarás ganándote su aprobación para fotografiarlos y entrometerte en su intimidad.
Revisa tus fotografías
Finalmente, pero no menos importante, aparte de disparar, cuando tengas un momento de tranquilidad revisa tus fotografías. Borra las que no te gusten y asegúrate de que has conseguido buenas fotos. Si no es el caso, estás a tiempo de volver al lugar donde has tomado la foto e intentar revivir esa sensación y repetir la fotografía. Si sólo revisas tu contenido cuando has vuelto a casa, puedes darte cuenta de errores que no podrás recuperar.
Información sacada de: http://happypeoplebarcelona.com/es/