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" EN LO MAS ALTO"

El atardecer comenzaba a desdibujar los cerros en la lejanía, decidió entonces que tenia que subir muy alto, tanto como la estrecha carretera le permitiera. Era un ejercicio que practicaba cuando la luz no era suficiente para atrapar la belleza que sentía frente a él.

Presuroso, se situó en el quicio de un saliente, sonriendo satisfecho por tanta belleza como tenía a su alcance; no titubeo a pesar de que el equilibrio le hacía dudar de conseguir lo máximo que sus ojos percibían.

Era tanta su belleza qué…

-se descubrió hablando al amarillo intenso y disculpándose por no haber comprendido antes que el cielo y la tierra estaban compinchados para sorprenderle.

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